viernes, 20 de agosto de 2010





Literatura del realismo

La literatura española del Realismo es un movimiento literario que forma parte del Realismo, un movimiento cultural que se impulsó en Europa a mediados del siglo XIX al mermar las tendencias del movimiento romántico. Es una corriente procedente de Francia que, hacia 1850, desarrolló gérmenes ya existentes en el Romanticismo, sobre todo el costumbrismo. Las ideas románticas se irían disolviendo poco a poco y se empezaba a reaccionar contra "el arte por el arte"; la mirada de algunos estaba cansada de lo imaginativo y pintoresco, y pretendió observar objetivamente a las personas, sociedad y acciones contemporáneas. Su objetivo era presentar un retrato de la sociedad. El principal precursor fue Honoré de Balzac (1799-1850) que, con obras como La Comedia Humana, impuso en la novela un fin moral y social. Esta finalidad, haciéndose casi exclusiva, muy pronto condujo, en algunos autores, al Naturalismo.



Literatura del romanticismo

El Romanticismo es un movimiento revolucionario en todos los ámbitos vitales que, en las artes, rompe con los esquemas establecidos en el Neoclasicismo, defendiendo la fantasía, la imaginación y las fuerzas irracionales del espíritu. El Neoclasicismo aún perdura en algunos autores, pero muchos, que se iniciaron en la postura neoclasicista, se convirtieron ávidamente al Romanticismo, como el Duque de Rivas o José de Espronceda. Otros, sin embargo, fueron desde sus inicios románticos convencidos.

El origen del término "romanticismo" dista mucho de ser claro, además, la evolución del movimiento cambia según el país. En el siglo XVII aparece ya en Inglaterra con el significado de "irreal". Samuel Pepys (1633 † 1703) lo emplea en el sentido de "emocionante" y "amoroso". James Boswell (1740 † 1795) lo utiliza para describir el aspecto de Córcega. Romantic aparece como adjetivo genérico para expresar lo "pasional" y "emotivo". En Alemania, sin embargo, fue empleado por Johann Gottfried Herder como sinónimo de "medieval". El término romanhaft (novelesco) fue reemplazado por romantisch, con connotaciones más emotivas y pasionales. En Francia, Jean-Jacques Rousseau lo utiliza en una descripción del Lago de Ginebra. En 1798, el Diccionario de la Academia Francesa recoge el sentido natural y el sentido literario de romantique. En España hay que esperar hasta 1805 para dar con la expresión romancista. Durante los años 1814 y 1818, tras sucesivas polémicas, se usan, aún con indecisión, los términos de romanesco, romancesco, románico y romántico.

Literatura Barroca

El barroco es un movimiento artístico y cultural dominante en el siglo XVII caracterizado por una evolución de las ideas y los aspectos temáticos y formales del Renacimiento. La visión neoplatónica e idealista del mundo renacentista entra en crisis, se hace compleja, conflictiva y contradictoria. Los recursos formales se intensifican en la búsqueda de nuevos caminos para la expresión artística.

Al principio el término barroco no se utilizó más que para las artes plásticas, es en los años 1920 cuando se empieza a hablar de barroco literario, aunque su período de influencia se ubica entre los siglos XVI y XVII dando la idea de que el movimiento afectó no sólo a la forma y a la plástica, sino también a las formas literarias. Aún más importante, asumir la existencia de un barroco literario supone asumir el barroco como un movimiento de tipo ideológico, no sólo formal y ver su profunda relación con la Contrarreforma. Sin embargo, esto llevó a algunos mucho más allá, negando su relación con el Renacimiento y presentándolo como un movimiento enfrentado, lo que tampoco es cierto.